Parece que la pre-campaña electoral
para las elecciones a Presidente del FC
Barcelona que, como muy tarde, serán en la primavera
de 2016, ya ha comenzado. Más allá de los posibles/probables candidatos quiero hacer unas reflexiones sobre lo que creo que cualquiera de ellos debe tener en cuenta.
Lo primero (y es a lo
que va dedicado esta
entrada), es el modelo de Club.
No el modelo en
cuanto hace referencia a la parte
deportiva, pero sí en cuanto a la
parte económico-social.
El Barça es un Club con unos 150.000 propietarios: los socios. Todos ellos con los mismos derechos y deberes. Cada 6 años,
por sufragio universal, elegimos la persona que nos deberá dirigir durante este período.
Cada año, para poder controlar la acción de la Junta, tenemos la Asamblea General de
Compromisarios. Primer problema. Los compromisarios, básicamente, son escogidos mediante un proceso de sorteo. Es decir, por mucho que uno quiera ir a esta Asamblea,
si la máquina no escoge tu número de socio, no
estarás. Esto, entre otras cosas,
hace que, una Asamblea que tiene más de 4.000 posibles
participantes, sólo tenga, a la hora de la verdad, en torno a unos 1.000. Poca
gente. Muy poca, para
decidir y, muchas veces, sin toda
la información necesaria, lo que queremos que se haga en
el próximo período.
Por otra parte, una de las cosas
que se está planteando es si, con el modelo actual, puede incrementarse, de manera sustancial el nivel de ingresos/beneficios del Club.
Al fin y al cabo, si el Club no tiene beneficios, no se pueden fichar jugadores (si hacen falta),
no se pueden hacer mejoras en infraestructuras, etc.
Para hacerlo fácil, diremos
que, básicamente, hay 3 tipos de
modelo de Club. El primero es
el que hemos dicho. El que tiene el Barça actualmente. Aquel donde, los que van
al campo, son los propietarios, al
100%, de todo lo que representa
el Club.
El segundo modelo es el que siguen la gran mayoría de Clubes todo el mundo. El Club es una sociedad con un(os) propietario(s). Estos
son los que deciden todo lo que pasa
en el Club. La gente que va al campo a ver los partidos, salvo
que sean accionistas, no tienen ningún
poder de decisión sobre lo que
pasa en el Club.
Hay un tercer modelo que,
mayoritariamente, se utiliza en
Alemania. Básicamente, en este
modelo, los seguidores (los "socios"
en el caso del Barça), son los
propietarios del Club de fútbol. Al mismo tiempo, existe una "Sociedad" que es la responsable
de todo el tema marketing,
publicidad, etc. Es decir, lo que es la
parte "no deportiva".
El Club (es decir, la parte deportiva), es
el accionista mayoritario de esta "Sociedad".
La pregunta
clave es: ¿Puede el Barça, con su estructura actual, mantener el mismo nivel de ingresos/beneficios que tienen los otros grandes Clubes?
Si la respuesta es SI,
no hace falta hablar más. Sólo (y ya representa
una gran faena), se deberán buscar
los mecanismos que permitan una mayor
participación del socio y, al mismo
tiempo, un mayor control de la actuación de la Junta Directiva.
Y, cuando digo control,
no quiero decir un organismo que fiscalice cada 5 minutos qué está haciendo la Junta. Al fin y al cabo, cuando se
escoge ésta es porque se cree que
son los mejores preparados para hacerlo. Me refiero a algún
tipo de "Parlamento" o, como se le quiera decir,
que sea capaz de decir SI o NO a ciertas actuaciones
concretas (como pueden ser el
dinero invertido en fichajes, infraestructuras,
etc.). No se trata de que, cada
vez que se compra un ordenador (por
poner un ejemplo), se tenga que pedir a
este Organismo que dé su aprobación. No. Esto
es el día a día de la Junta. Se trata, a grandes rasgos, del control general de las grandes partidas
del Presupuesto.
Si la respuesta a la pregunta que nos
hemos hecho antes es NO, será
necesario que vayamos pensando qué
queremos ser. Qué y cómo.
Ser una "Sociedad", como
la mayoría de Clubes, representa que,
los que van al campo, como principio, no
deciden nada. Ya no son propietarios. Los propietarios son un grupo de gente que invierte su dinero y que, como tal, su primer objetivo es tener un beneficio económico.
No deportivo. Para
que nos entendamos: ganar la Champions League es bueno por el dinero que
representa para la entidad, no
por el hecho deportivo. Esto
significa que se pueden comprar y
vender jugadores en función
de una cuenta de resultados, no del rendimiento que puedan dar en el campo. La gran ventaja, para la mayoría de los "socios" actuales es que nuestro dinero ya no corre
peligro. Son otros
quienes ganan o pierden. Como cualquier empresa normal
y corriente. Porque eso es en lo
que se convertiría el Barça.
Una empresa como cualquiera que fabrica coches o
bebidas. Como cualquier empresa
normal y corriente, habrá unos sponsors/patrocinadores
que pagarán un dinero para que en el campo se vean sus marcas comerciales.
Que serán quienes tienen derecho a tener entradas para los partidos importantes. Por eso pagan. A los demás,
si nos gusta, bien y, si no, también. Y, el día que se cansen de este "juguete"
marcharán. Venderán sus acciones a otras personas.
Que continuarán decidiendo lo mejor para sus bolsillos. Ejemplos de ello son el
Manchester United, Milan, Liverpool, PSG, etc.
La segunda opción, si no fuera posible
la actual, es el modelo alemán. Aquí, hay una
sociedad que representa lo que no es parte deportiva. El
Club deportivo sigue siendo
propiedad de los socios y, estos siempre tienen la mayoría de las acciones de la sociedad.
En esta sentido, recomiendo
el siguiente
artículo de @feriurgo donde se explica con mucha claridad cómo funciona el sistema. Tiene las ventajas que
representa poder disponer de una buena
cantidad de dinero. El
inconveniente, como en el caso anterior, es que ya no sería todo nuestro. El Bayern, Borussia
Dortmund, etc. funcionan con este
modelo.
Hay, todavía, otra opción.
Aceptar que no podemos crecer más con el sistema actual y, no querer cambiar. Esto puede representar que podemos estar bastantes años sin ganar la Champions League (y,
quizás, ni participar). Por otra parte, esto también representará
que el trabajo que se haga con la base todavía tendrá que ser muy superior al que
hacemos ahora, dado que no dispondremos del
dinero necesario ni, para comprar
a grandes jugadores (cuando hagan falta),
ni pagar grandes
los salarios que estos tienen.
Es quedarse con el modelo actual (suponiendo que no se pueda crecer más con él), con
todo lo que representaría a todos
los niveles.
En cualquier caso, lo primero que tiene que
decidir quien quiera ser el
próximo Presidente del Barça
es esto. Sin la definición
de este modelo, difícilmente se podrá decidir la política deportiva,
a la que dedicaré la siguiente entrada.
Jordi Pascual
Me podéis seguir en
Twitter: @JordiPascualP
Gracias Jordi por la mención. Para acotar un poco más el "modelo alemán", simplemente decir que es un modelo que permite la entrada de accionistas privados (cualquiera que sea el interés que tengan en invertir) pero donde el club (los socios) mantendría siempre el 50%+1 de los votos, del poder de decisión.
ResponderEliminarMientras que este modelo supondría para los clubes que sean capaces de atraer estas inversiones una importante inyección de fondos, si hubiera equipos que no son capaces de recabar estas inversiones, se abriría una brecha económica muy grande. En Alemania se pueden ver los efectos ya. El sistema del 50+1 tiene muchos críticos también.
Lo que dijo Florentino es cierto: si Madrid o Barcelona se convierten SAD, la brecha económica con el resto de equipos de la Liga espanola ya sería abismal, si no lo es ya.
Saludos
Gracias a tí por el artículo. Para muchos, neófitos en estas cosas, nos ayuda a tener más puntos de vista. Ver todos los posibles escenarios que hay y, que sean aquellos que se van a presentar quienes nos digan qué modelo quieren. Los socios debemos saber qué nos traeran los que vengan.
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