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viernes, 19 de abril de 2013

MEMORIAS DE OSLO (y 5)

Esta es la última entrada sobre mi viaje a Noruega para atender al UEFA Grassroots Workshop. Aquí os contaré algunas de las cosas que me he encontrado de la vida en este país.

Las dos primeras cosas que uno nota cuando llega al aeropuerto de Oslo son los precios y la limpieza. Un café cuesta alrededor de unos 4 €, una pizza, 14-15 € m, una bebida no alcohólica, unos 7-8, una cerveza, 12 € y un entrecot, unos 40-45 €. El trayecto en taxi del centro de la ciudad en el Aeropuerto es unos 90 €, si bien es cierto que el trayecto es de unos 35-40 minutos. Es verdad que el nivel de vida por estos lares es altísimo, pero si lo comparas con lo que hay en Andorra o España, es una locura. Si, los impuestos son muy altos, pero también se notan en la educación, sanidad, infraestructuras, ec.

La otra cosa, como os decía, es la limpieza: no se ve ni un papel ni un cigarrillo por el suelo (el tabaco también está a un precio escandalo, por cierto), pero también hay que decir que hay ceniceros y papeleras en todas partes. Los hoteles, restaurantes, edificios de oficinas, etc, todos tienen fuera grandes ceniceros para los fumadores y, cuando vas por la calle, hay uno cada 4 pasos.

El salmón. Ya es conocido que el salmón es una de las cosas más típicas de Noruega, y, aparece en todas las comidas. Hasta, incluso, en la cena del último día, el primer plato era a base de salmón, preparado de 3 maneras diferentes. Todo hay que decirlo y, el "surimi" de salmón que teníamos el buffet de nuestras comidas era absolutamente delicioso.

El tema de las tecnologías es otro punto importante. Ya he hablado de la gran presencia "on-line" para cursos de entrenadores, diseño de sesiones, etc. pero es que ¡incluso los autobuses y taxis llevan wi-fi! Lo descubrimos el segundo día, cuando íbamos hacia la cena y, el último, cuando íbamos al aeropuerto (un mini-bus para 15 plazas), también tenía wi-fi. Por cierto, que en el aeropuerto de Oslo también tienes 2 horas gratuitas de Wi-fi (¡¡igual que en Barcelona!!).

Como ya he comentado, el tema de los voluntarios es otro tema importante en este país. Entre el nivel de vida que tienen, los horarios de trabajo (la jornada laboral termina sobre las 3,30-4 de la tarde y, el escolar sobre las 2-3 de la tarde), hay muchas horas libres y se dedican a muchas cosas (entre ellas el deporte y el voluntariado, en todas sus facetas).

Otra cosa que he notado es que la gente que trabaja de cara al público siempre tiene una sonrisa en la boca. Curiosamente, esta gente, que tiene fama de "fría", suele ser de lo más amable (también lo he visto en Suecia o Finlandia, es decir, no es una cosa rara), cuando se trata de trabajar para los demás. Tienen muy claro que es el cliente el que hace un favor por ir a tu negocio y que no es la tienda o restaurante el que hace un "favor" al cliente. Por aquí se debería tomar nota de estas cosas.

Hasta aquí lo que ha dado este viaje a Oslo. ¡Espero que os haya gustado esta serie de entradas y que las disfrutéis leyéndolas como yo he hecho escribiéndolas!

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