Pienso
que, en las próximas semanas y meses habrá un incremento notable de
vuelos con destino a Alemania, más bien a Munich y Dortmund. El
fútbol funciona a base de "modas" y ahora, después de las semifinales
de Champions, los alemanes son la "moda", el nuevo modelo a seguir. Todos querrán hacer como ellos, en todos los aspectos.
Si, hasta ayer, el modelo de trabajo eran los equipos españoles (y, en particular el Barça, con toda la colección de títulos de los últimos años), a partir de hoy, esto se ha acabado y, oíremos, entre otras muchas cosas, que:
1. El "tiki-taka" ya no sirve.
2. El juego de posesión ha caducado.
3. Los jugadores pequeños no sirven para este tipo de partidos.
4. El juego debe basarse más en jugar a lo que nos imponga el adversario y no, aplicar lo que nosotros trabajamos.
¿De verdad? ¿Seguro? ¿Lo tenemos claro?
Vamos por partes. Las dos primeras afirmaciones van juntas. Creer en lo que acabo de poner es no saber qué es el fútbol basado en la "posesión", ni cómo funciona, ni cómo se entrena (más allá de que guste o no este modelo: cada uno juega como le gusta, que quede claro) . Este tipo de fútbol - como cualquier otro -, tiene unos principios a todos los niveles y, hay que seguirlos. Ya hablé sobre esto en la anterior entrada y, ahora mismo no volveré. Lo que sí debe quedar claro es que, como cualquier receta de cocina o fórmula química, si no hay los ingredientes adecuados en el orden adecuado y con el tiempo adecuado, el "producto" final no es el adecuado. Y, para mí, esto, tal y como dije, es lo que ocurre ahora.
Más. Se ha puesto el ejemplo de los jugadores pequeños para entender este modelo de fútbol. ¿Por qué? Muy sencillo: como los jugadores grandes son para defender, los pequeños son para atacar. Esto creo que también es incorrecto. Es cierto que tener jugadores de 1.90 ayuda a defender córners y faltas pero, como decía Cruyff, si tenemos problemas para defender los córners, lo que tenemos que hacer es no conceder córners. ¿Qué quiere decir esto? Pues que tenemos que jugar de la manera que tengamos las mayores opciones de maximizar nuestras virtudes y, minimizar nuestros defectos. Por otra parte, nunca he tenido claro que los jugadores grandes no puedan ser jugadores de alta calidad técnica. Simplemente creo que, en general, el entrenamiento de estos jugadores ha sido dirigido hacia destruir juego y no hacia crear juego y, por ello, sucede lo que vemos hoy en día en los campos de fútbol. Y, a la inversa, como los jugadores pequeños sólo se les enseña a tocar y tocar y no se les enseña a luchar pelotas divididas, cuando se encuentran con ello, tienen problemas.
Finalmente, ahora resultará que hay que ser reactivo. Todo el mundo dice que hay que ser proactivo, pero lo que cada vez se hace más se jugar en función del contrario. No estoy de acuerdo. Creo que se confunden las ideas. Una cosa es tener un modelo/estilo de juego y, hacer las adaptaciones necesarias en función del rival que nos encontramos. Un día, jugaremos con la defensa más adelantada. Otro día tendremos los jugadores de banda más abiertos; otro haremos otra cosa, pero siempre tenemos que respetar nuestra idea de juego. Y esto no tiene nada que ver jugar en función del rival: si el rival es ofensivo, jugamos a la contra, si el rival es defensivo, jugaremos al ataque, si ... lo que desee. Cambiar de esquema/sistema, significa cambiar mecanismos, automatismos y, si esto no se ha trabajado bien en los entrenamientos, no saldrá en el partido. En el fútbol no hay milagros. Hay mucho trabajo. Los equipos profesionales, puede ser que sí tienen tantas horas que les permite hacer cosas completamente diferentes de un día para otro y, todo y ello, la mayoría tienen una idea básica de su juego. Para el resto, los que trabajamos con equipos de base o amateurs, la cosa es muy diferente. Ni mejor, ni peor, pero sí muy diferente.
Pensamos en todo esto cuando vayamos de compras en Alemania. No es lo mismo un BMW que un Mercedes o que un Porsche, aunque todos se fabriquen en el mismo país. Y, puede ser que nos interese más tener algún modelo de Opel o Audi fabricados por aquí en los alrededores.
Si, hasta ayer, el modelo de trabajo eran los equipos españoles (y, en particular el Barça, con toda la colección de títulos de los últimos años), a partir de hoy, esto se ha acabado y, oíremos, entre otras muchas cosas, que:
1. El "tiki-taka" ya no sirve.
2. El juego de posesión ha caducado.
3. Los jugadores pequeños no sirven para este tipo de partidos.
4. El juego debe basarse más en jugar a lo que nos imponga el adversario y no, aplicar lo que nosotros trabajamos.
¿De verdad? ¿Seguro? ¿Lo tenemos claro?
Vamos por partes. Las dos primeras afirmaciones van juntas. Creer en lo que acabo de poner es no saber qué es el fútbol basado en la "posesión", ni cómo funciona, ni cómo se entrena (más allá de que guste o no este modelo: cada uno juega como le gusta, que quede claro) . Este tipo de fútbol - como cualquier otro -, tiene unos principios a todos los niveles y, hay que seguirlos. Ya hablé sobre esto en la anterior entrada y, ahora mismo no volveré. Lo que sí debe quedar claro es que, como cualquier receta de cocina o fórmula química, si no hay los ingredientes adecuados en el orden adecuado y con el tiempo adecuado, el "producto" final no es el adecuado. Y, para mí, esto, tal y como dije, es lo que ocurre ahora.
Más. Se ha puesto el ejemplo de los jugadores pequeños para entender este modelo de fútbol. ¿Por qué? Muy sencillo: como los jugadores grandes son para defender, los pequeños son para atacar. Esto creo que también es incorrecto. Es cierto que tener jugadores de 1.90 ayuda a defender córners y faltas pero, como decía Cruyff, si tenemos problemas para defender los córners, lo que tenemos que hacer es no conceder córners. ¿Qué quiere decir esto? Pues que tenemos que jugar de la manera que tengamos las mayores opciones de maximizar nuestras virtudes y, minimizar nuestros defectos. Por otra parte, nunca he tenido claro que los jugadores grandes no puedan ser jugadores de alta calidad técnica. Simplemente creo que, en general, el entrenamiento de estos jugadores ha sido dirigido hacia destruir juego y no hacia crear juego y, por ello, sucede lo que vemos hoy en día en los campos de fútbol. Y, a la inversa, como los jugadores pequeños sólo se les enseña a tocar y tocar y no se les enseña a luchar pelotas divididas, cuando se encuentran con ello, tienen problemas.
Finalmente, ahora resultará que hay que ser reactivo. Todo el mundo dice que hay que ser proactivo, pero lo que cada vez se hace más se jugar en función del contrario. No estoy de acuerdo. Creo que se confunden las ideas. Una cosa es tener un modelo/estilo de juego y, hacer las adaptaciones necesarias en función del rival que nos encontramos. Un día, jugaremos con la defensa más adelantada. Otro día tendremos los jugadores de banda más abiertos; otro haremos otra cosa, pero siempre tenemos que respetar nuestra idea de juego. Y esto no tiene nada que ver jugar en función del rival: si el rival es ofensivo, jugamos a la contra, si el rival es defensivo, jugaremos al ataque, si ... lo que desee. Cambiar de esquema/sistema, significa cambiar mecanismos, automatismos y, si esto no se ha trabajado bien en los entrenamientos, no saldrá en el partido. En el fútbol no hay milagros. Hay mucho trabajo. Los equipos profesionales, puede ser que sí tienen tantas horas que les permite hacer cosas completamente diferentes de un día para otro y, todo y ello, la mayoría tienen una idea básica de su juego. Para el resto, los que trabajamos con equipos de base o amateurs, la cosa es muy diferente. Ni mejor, ni peor, pero sí muy diferente.
Pensamos en todo esto cuando vayamos de compras en Alemania. No es lo mismo un BMW que un Mercedes o que un Porsche, aunque todos se fabriquen en el mismo país. Y, puede ser que nos interese más tener algún modelo de Opel o Audi fabricados por aquí en los alrededores.
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